El diario de Noa: capítulo 60º

Si seguía con mi relación secreta con Rafa era porque en esos momentos de bajón lo necesitaba. Necesitaba sentirme querida, deseada, anhelada y que me mimasen en exceso. Necesitaba mi fantasía fetichista de hacerme la dormida más que nunca. Aunque también aquí las cosas cambiaron mucho. Porque Rafa ya no era tampoco el de antes, todo se había vuelto demasiado mecánico, apático, aburrido y desapasionado. Lo hacía ya sin interés y repitiendo mecánicamente lo que había hecho otros días. Estaba claro que él también se aburría de esta fantasía light y se mostraba tan distraído y aburrido como yo. Todo parecía indicar que era el principio del fin de esta extraña relación entre ambos.

De camino a casa en coche rompió Rafa el silencio, como siempre, y empezó a hablar: “sabes una cosa, la forma como vas vestida hoy así con esa rebeca verde y esa camisa a rayas verde se parece bastante a ir de colegiala”. Permaneció unos segundos sin hablar hasta que lo hizo preguntando: “¿has pensado en lo que te dije el otro día de vestirte de colegiala para que así la fantasía sea más morbosa e interesante?”. Ni siquiera me acordaba de eso. Se me había olvidado por completo. El anterior día apenas le escuché y a lo largo de la semana ni me acordé por un segundo. No era algo que me interesara y desde luego lo que carcomía mi cabeza era el tema de Edu y su novia, y no las fantasías fetichistas de Rafa.

Rafa volvió a insistir: “venga, verás como será todo mucho más diferente, especial y con más morbo. Será todo prácticamente igual, tú haciéndote la dormida pero vestida de colegiala, solo eso”. En cierta manera me hizo gracia como sus ojos recobraron la ilusión cuando hablaba de estas cosas, parecía estar risueño, feliz y muy entusiasmado con la idea. Yo pensaba para mi misma que era la típica fantasía de todos los chicos, pero que a mí particularmente no me atraía nada. La ilusión de Rafa no disminuyó, al contrario, cuanto más hablaba más entusiasmado y convincente parecía. Como si la vida le fuese en ello. Como si fuese su sueño y su fantasía más especial de todos los tiempos. Yo al final solo dije: “bueno, ya te dije que me lo pensaré, pero no te aseguro nada”. Su entusiasmo e ilusión era contagiosa, sin duda, pero yo no estaba convencida del todo.

2 comentarios:

  1. Querida Noa.

    Despues de leer todo tu diario no sabria por donde empezar. En primer lugar es justo decir que es interesante, pero lleno de contradicciones. No entiendo como puedes ofenderte por los escarceos de Aneglica con Edu, ofenderte por que Rafa te sugiera lo del chalet o simplemente porque te quiera desabrochar la camisa, cuando hasta el momento te has dejado sobar por 3 chicos diferentes, algo que no es por supuesto malo, pero no puedes ofenderte por esas cosas o decir que angelica denigra a las mujeres porque tu eres la primera que no se deja respetar.
    Porque no, no te haces respetar, ni controlas las reacciones de los chicos ni los manipulas como crees.... La conclusion? que te han sobao las tetas porque han querido ellos y no, no controlabas ni manipulabas ni manejabas a nadie.
    En fin hija,leyendo esto por interesante que sea nos demuestras que eres una calientapollas, prepotente, engreida, egocencrita y te lo tienes muy creido cuando lo unico que han echo ha sido aprovecharse de ti.
    No se como termianara o seguira la historia, pero nos estas dejando a las mujeres a la altura del betun guapa.

    ResponderEliminar
  2. Siento de veras que esta sea tu opinión. Yo solo estoy contando paso a paso todo lo que ocurrió. De todos modos he recibido comentarios de otras personas que opinan lo contrario que tú. Aun así respecto, por supuesto, todo lo que dices.

    ResponderEliminar